también
yo vi a triple h ganarle a cactus jack
era una noche de febrero y papá seguía en la oficina
hizo frío y el nuevo siglo se anunciaba con la avidez de un
violador
peleaban encerrados dentro de una jaula que bien pudo ser
una pecera
/ o el propio paraíso
dos los hombres que no eran hombres sino máquinas
analíticas
dos los emblemas de fuego saliendo de la axila de un dios
encadenado
dos los jinetes del relámpago que recorrían el mismo páramo
otra y mil veces
cactus jack apareció como el enano de un espectáculo
circense
campeón del polvo debajo de los muebles de los anuarios
olvidados
/ de la pelusa dentro del oído
contra él no pudieron ni los contratos ni las orugas ni el
hambre de las luminarias
porque cactus jack masticaba marejadas y escupía
esquizofrénicos
cactus jack se cogía al cielo y los hombres hacían del miedo
una letanía
cactus jack no sangraba porque su cráneo era autopista
descubierta
/ para asombro de batracios
contra él no pudieron ni el undertaker ni bret the
hitman hart ni hulk hogan
pero triple h fue más fuerte más feroz
en su pectorales la implacable maquinaria de la violencia
en sus cabellos la rabia desmerecida de todos sus ancestros
en sus ojos la seguridad de quien se quiere victorioso antes
del abordaje
el viejo cactus jack se defendió a como pudo
fue elefante embistiendo a su cazador aunque de todos modos
caiga abatido
fue nuestra infancia cuando algún petardo graciosamente
/ nos reventaba ambas manos
y recuerdo aquella noche avanzando con la languidez de los
deudos
y recuerdo a cactus jack convirtiéndose en artefacto de
arena
reducido por algo más que golpes y patadas y llaves de
sumisión
recuerdo al tiempo en su papel de saboteador de terrorista
de novio celoso
el tiempo reclamando derechos que sólo ambiciona alguien no
invitado a la cena
testarudo cactus jack se defendió como mejor supo
pero triple h fue la tormenta el desaire el futuro
y mientras lo sacaban en una camilla con la espalda
destrozada
un posible trauma craneoencefálico múltiples escoriaciones
por todo el cuerpo
/ y un hombro dislocado
cactus jack levantó el único brazo útil y se despidió
/ igual que la caja negra de un avión
con afán de tristeza pero también afán de valentía
con ganas de gritar yo estuve donde este niño hoy engulle al
mundo
y duré lo mismo que duran esos largos sueños que uno
defiende a pesar del arrojo
esto puede confirmarlo cualquiera que haya estado allí
cuando triple h finalmente venció a cactus jack
fue la misma noche en que papá no regresó a casa
la noche en que todos los héroes entraban de espaldas al
bosque